Conforme a las últimas reformas penales, las empresas pueden ser acusadas por la comisión de un delito y condenadas a penas que pueden incluir su cierre, incluso por acciones imprudentes de sus propios trabajadores (casos de soborno, competencia desleal, delitos fiscales y así hasta 25 delitos).
Los continuos cambios normativos, la complejidad del mundo empresarial actual, la presión de los mercados y el sobre-dimensionamiento de las organizaciones ponen en riesgo a las empresas y a sus administradores y directivos.
Tranquilidad y seguridad
En este contexto, es necesaria la ejecución de un plan de prevención de riesgos penales por parte de profesionales especializados que suprime la responsabilidad penal y es esencial para la tranquilidad y seguridad de los empresarios y sus empresas.
Confianza y credibilidad
El plan de prevención, certificado por Judilex, garantiza el cumplimiento de la normativa penal, y es además una prueba de transparencia y honestidad de la empresa; un valor añadido que sin duda también genera de forma objetiva credibilidad y confianza a los clientes y proveedores.